Internet se ha transformado en una herramienta indispensable del día tras día de millones de personas. Estas pasan muchas horas conectadas desde el PC o dispositivos móviles. Los agentes promocionales no quieren renunciar a las altas posibilidades que este medio ofrece y, por eso, logran llegar a la audiencia merced a los distintos formatos de anuncios y publicidad en Internet que se encuentran en la Red: desde los más tradicionales, como el banner, a las últimas novedades, todos tienen un retorno de la inversión verdaderamente positivo.
La publicidad, por definición, evoluciona constantemente, con un desarrollo permanente para poder agradar al púbico, que está curado de espanto y acostumbra a rechazar, de primeras, cualquier género de publicidad.
Al igual que los formatos web van evolucionando según aparecen técnicas nuevas y cambian las preferencias de los consumidores, asimismo cambian los formatos publicitarios. Pero que aparezcan nuevos formatos a fin de que las marcas puedan anunciarse no quiere decir que los formatos viejos desaparezcan.
Desde sus inicios, las agencias de publicidad y los anunciantes vieron en Internet una gran plataforma para poder llegar al público, conocerlo y enseñar los productos que les estaban ofreciendo.
Gracias a las posibilidades que ofrece, la publicidad en Internet debía ser muy distinta a la que se ofrece en los soportes más tradicionales, como la prensa, radio o bien televisión. Además, asimismo hay que tener en cuenta la multitud de posibilidades que ofrece Internet: desde los primeros formatos surgidos hasta las espectaculares creaciones que se pueden ver la actualidad, van apareciendo nuevos formatos de manera constante.
Los formatos se mezclan entre sí para dar lugar a otros nuevos, más espectaculares y que llaman más la atención de los posibles clientes del servicio. La creatividad reina en Internet y las agencias no tienen límites a la hora de dar a conocer los productos de las marcas.
Otra gran baza de Internet para los anunciantes es la amplia segmentación que ofrece. Cada página cuenta con un público objetivo concreto que los anunciantes pueden aprovechar. Además de esto, asimismo resaltan los análisis de las personas que utilizan Internet, sus usos y costumbres y qué visitan.
Todas estas características propias de la Red hacen que los formatos promocionales sean constantemente novedosos y, muchas veces, la audiencia no perciba como publicidad alguno de los mensajes que se le ofrecen.
En los últimos tiempos, además de esto, la interactividad está consiguiendo un papel realmente importante y esto hace que los mensajes promocionales sean cada vez más atractivos para los clientes del servicio.
A continuación, los formatos más habituales que las marcas emplean para anunciarse en Internet.
El banneres el primero de los formatos publicitarios de Internet y también se trata del más sencillo. De hecho, tal es su popularidad que muchas personas hablan de banner para referirse a toda la publicidad en Internet.
Pero, en realidad, el banner tiene unas características concretas y diferentes de otros formatos promocionales de Internet. Se trata de un espacio de 468×60 píxeles, como imagen en una web y que, generalmente, al clicarlo, lleva a la página de la marca que cita.
Muchos anunciantes rechazan hoy en día el banner exactamente por su formato y la poca adecuación que tiene su tamaño a los diseños de las páginas más actuales: resulta demasiado pequeño para atraer la atención del público.
La evolución natural del banner a tamaños más grandes dio sitio a lo que es conocido como superbanner o megabanner. Sus medidas son extensamente superiores y ocupa, por lo general, todo el ancho de la página web: 728×80 píxeles. Prácticamente se puede ver en todas las páginas hoy en día.
El superbanner es mucho más polivalente que el banner y puede expandirse en tamaño para ocupar espacios que se adecuan mejor al diseño de la web: no es extraño encontrarse con superbanners que alcanzan los 180 píxeles de alto.
Además, merced a sus peculiaridades propias, el superbanner puede contener animaciones o vídeos, aparte de sonidos.
Lo que más gusta a los anunciantes del superbanner es que encabeza la página: acostumbra a colocarse en la parte superior y da la sensación a los visitantes de que están frente a una información verdaderamente prioritaria. Además, el superbanner es mucho menos intrusivo para los visitantes, pues suele expandirse solo si se pasa el ratón por encima de él.
Cuando el banner tiene un tamaño de 234×60 pixeles es conocido como minibanner. Además de ser realmente pequeño, consultor seo almeria de diseño, con texto e imágenes no animadas.
Aún se hallan anuncios más pequeños, conocidos como botón, con unas dimensiones estandarizadas de 120×60 o 90×90 píxeles.
Como ya se comentaba con el banner, este género de formato se ha revelado como obsoleto, en tanto que ahora priman la calidad de imagen y las animaciones. Son muchas las marcas que han dejado de utilizarlos.
Cuando se quiere trabajar solo con texto, el formato elegido es el text-link. Las empresas han dejado de usarlo primordialmente por su limitación a 30 caracteres. Pero no debe dejar de aparecer en esta lista de formatos de publicidad en Internet, pues ha estado al lado de anunciantes y consumidores durante muchos años.
Se ha dejado de utilizar, eminentemente, porque carece de las peculiaridades que se prefieren hoy en día, puesto que no ofrece un diseño espectacular que llame la atención de los usuarios.
Gracias a sus peculiaridades propias, el text-link es un formato conveniente para los anunciantes que procuran links a su página de Internet. Si uno desea usarlo y obtener un retorno de inversión perfecto, va a deber escoger apropiadamente las keywords o bien palabras clave.
El skyscraper (conocido en España como rascacielos) tiene un diseño vertical, muy adecuado para ser puesto en sidebars de las páginas web (los laterales).
Por lo general, el skyscraper suele diseñarse con un tamaño de 120×600 píxeles, mas en la actualidad, con los cambios de los diseños y formatos, también se utilizan tamaños mayores, con diseños que alcanzan los 160×600 píxeles.
Los anunciantes asimismo apuestan de vez en cuando por un formato similar de 300×600 píxeles, conocido como doble-sky.
A la hora de utilizar el skyscraper, los anunciantes destacan que el usuario está viéndolo mientras continúa en la web por su diseño vertical.
El robapáginas se ha transformado en el formato estrella de la publicidad en Internet. Solo con una navegación rápida es posible encontrarlo muy fácilmente.
El diseño del robapáginas es cuadrado, lo que deja que el anuncio se muestre de una manera que resulta atrayente para los visitantes, pero muy sencilla de diseñar para los creativos de los anuncios.
En cuanto al tamaño, acostumbra a jugarse con el robapáginas de 300×250 píxeles, mas, gracias a su gran flexibilidad, asimismo pueden encontrarse otras opciones personalizables para que encaje mejor con el diseño de la página, como 400x400 píxeles o bien 200×200 píxeles.
Respecto a la localización, por norma general, se halla en sidebars de páginas, como un recuadro que resalta sobre el resto de sus contenidos. De esta manera, llama la atención de los visitantes de la página, sin interrumpir su normal visualización de esta, y les deja percibir toda la información con un simple golpe de vista. De ahí que, los anunciantes lo usan, puesto que tiene un retorno de inversión verdaderamente elevado.
El formato interstitial ocupa toda la pantalla: un fondo blanco se sobrepone a la página web, con una ventana de 800×600 píxeles que se abre en el centro. En general, el interstitial solo aparece la primera vez que se visita una web o bien al cambiar de sección.
Seguramente uno ya se haya encontrado con algún interstitial y lo haya ignorado, cerrándolo merced al aspa (cruz) de la parte superior derecha del anuncio y que, al clicar en ella, deja regresar a la página. Por ende, este medio no es nada ventajoso para los anunciantes: es demasiado invasivo, si bien, una vez que sale, es imposible escapar del mesaje.
Por lo general, el reminder acompaña al interstitial: cuando se cierra, se integra en el diseño de la página y se hace más pequeño, de manera que es afín a un banner (también cabe la posibilidad de que sea un megabanner) o, si el diseño se acomoda más, a un robapáginas, en dependencia de la situación y del tamaño que se les dé.
Recibe su nombre precisamente de esto, del recuerdo que produce del interstitial: el reminder estimula la memoria del visitante a la página web.
Este formato, el layer, resulta muy semejante al interstitial, aunque con características principales: al tiempo que antes se comentaba que el interstitial aparecía, en general, cuando se visitaba una web por primera vez, el layer no tiene esa liminación y puede ser instalado en cualquier parte de la página, desplegándose por encima de ella. Así, se consigue que el visitante le preste atención y el efecto llamada es mucho mayor.
Por lo general, cuando se trabaja con un layer, su diseño se centra en uno estándar de 400×400 píxeles y el usuario tiene la posibilidad de cerrarlo gracias a un aspa similar a la de otros formatos.
Este formato asimismo resulta molesto para los usuarios, pues, al abrirse, cubre las imágenes que se ven o el texto que se lee, lo que interfiere en la comunicación entre el visitante y la web.
El brand day es un formato por el que suelen apostar las marcas grandes, puesto que ofrece la posibilidad de contar con todos los espacios promocionales de la página web en exclusiva y logra que el visitante no se distraiga con otras.
La marca aparece en todas unas partes de la página y la publicidad se mimetiza con su contenido: en header, sidebars, portada, despleglables u ocupando todo el fondo tras el contenido de la página web.
El brand day es el formato que mayor impacto ofrece a las marcas que se anuncian en una web y da una notoriedad muy señalada.
Los rich media son aquellos anuncios que dejan a los visitantes de las webs interaccionar directamente con las marcas que se promocionan. Hay que llevar cuidado al incluirlos, puesto que pesan (entre 100kb y 10Mb, generalmente) y llevan incluidos vídeos, como animaciones. Además, deben dejar que el usuario interactúe de forma activa.
Por lo general, los rich media son desplegables e, incluso, se desplazan por la pantalla. Es una gran idea usarlos, puesto que, al sentirse involucrado, el posible consumidor tiene una contestación más positiva para la marca.
El billboard es un formato de gran tamaño (970×250 px), que apuesta por la alta calidad de las imágenes que incluye y la interacción marca–cliente. Este formato puede ser expandido y, por lo general, los vídeos y animaciones duran unos 2 minutos. Los anuncios bajo este formato resultan realmente útiles para atraer público a las marcas.
El formato billboard requiere una alta creatividad por la parte de los anunciantes, en tanto que los vídeos que muestra deben ser virales e interactivos, para que el público se moleste en pasar tiempo en ellos.
Para ver este vídeo en Internet, tienes que aguardar a que pase un anuncio. Esto es lo que es conocido como formato pre-roll. Muchas veces, las marcas usan para este formato exactamente el mismo anuncio que pasan en la tele.
Cuando se comenzaron a usar anuncios en este formato fueron muchas las voces seo en málaga , si bien hoy día su éxito es tal que ha evolucionado y ha dado lugar a otros formatos: cuando se pausa el vídeo para mostrar el anuncio, se llama mid-roll, o asimismo se puede incluir al final de este, lo que se conoce como post-roll.
Cuando una ventana emerge repentinamente en la página web y también interrumpe la navegación normal por parte del usuario, se conoce como pop-up, si aparece en la parte superior; y pop-under, si lo hace abajo.
Este formato es rechazado, pues es intrusivo y genera molestia y rechazo por la parte del usuario.
Es formato es muy habitual en los últimos tiempos, ya que consiste en presentar un contenido publicitario redactado y diseñado tal y como si se tratase de una nueva. Precisamente por ese diseño, el advertorial tiene credibilidad y relevancia. Pero hay que tener cuidado con abusar de su empleo, pues la página web puede resultar dañada y valorada como las que solo ofrecen contenidos publicitarios